El entrenador del quinteto Boyacá Orgullo de América, el dominicano, José Adriano Diloné no ocultó su nostalgia, por la soledad que mostraron las tribunas del coliseo Toto Hernández, que en el pasado reciente siempre se vio colmado de público.
“Veo con tristeza que el baloncesto se apagó en el Norte de Santander”, dijo de manera lacónica el centroamericano, quien es padre de un hijo cucuteño.
Diloné señaló que las victorias en el Invitacional Copa Federación de 2008 y 2009 en lugar de hacer un bien lo que hicieron fue un daño.
Afirmó que lo que observó le hizo recordar la frase del entrenador de fútbol Francisco Maturana “que a veces ganando se pierde y otras que perdiendo se gana”
“Se ganaron dos títulos en el sentido deportivo, pero se perdió en el sentido de trabajo. Lo que veo ahora es que no hay tantos jugadores ni ímpetu. Me dio tristeza ver un estadio vacio cuando todo el mundo tiene pavor de venir a jugar a esta cancha, por la fanaticada”.
José Adriano Diloné aconsejó a la gente acompañar a la escuadra porque la única manera que tiene un deporte de mantenerse es con el apoyo de los fanáticos.
“De corazón le digo a los aficionados la necesidad de apoyar al baloncesto. No es a unos directivos, ni a quienes manejan al equipo. Ellos (los directivos) son temporales, vienen y van. Hay que ir a la Toto a hacer presencia para que vuelva hacer lo que era”.
El dominicano, quien orientó a Cañoneros Norte, recordó que cuando se fue de Cúcuta lo hizo por inconvenientes con algunas personas, que vendieron la idea que él no podía hacer un trabajo porque era extranjero y se olvidaron que tenía un hijo cucuteño y se sentía por ese hecho un colombiano más.
Manifestó que le agradó que la Liga tenga un trabajo de masificación similar a uno que se hizo con Cañoneritos, que se debe impulsar. Sugirió que sería interesante que el Cúcuta Norte más que un equipo sea un club de básquet de formación de jugadores tanto en lo personal como en lo profesional.
“Cañoneros tuvo jugadores de afuera como Pimienta (Édgar), Hooker (Julián), y otros de Cúcuta como ‘El Topito’ López (José) y ‘El Chaquita’ Medina (Oscar) a quienes se le brindó la oportunidad de capacitarse”.
Contó que los jugadores gracias al apoyo que brindaron Manuel Guillermo Mora, Hernán Gómez, Rodrigo Fuentes, Álvaro Hernández, quienes les buscaron becas, se quedaron y en reciprocidad sufrían por la camiseta, tenían sentido de pertenencia.
“Los títulos de 2008 y 2009 hicieron ídolos de barros, que no demerita lo que se consiguió porque entregaron gloria a la ciudad, pero ahora se miran las consecuencias”.
Fuente: Pedro L. Jáuregui Ávila / Diario La Opinión
(Foto Schneyder Mendoza / La Opinión)
Publicado por: www.basketdominicano.com
0 comentarios :
Publicar un comentario
Gracias por visitar www.basketdominicano.com tus comentarios son muy importantes para nosotros... El Basket nos Une!!!