En la vida todos cometemos errores, pero lo importante no es sentarse a lamentarnos de ellos sino ver que aprendemos para no volverlos a cometer.

Es por eso, que después de terminado el Campeonato Centrobasket 2010 celebrado en Santo Domingo del 5 al 12 de julio (era hasta el 11, pero por una suspensión de una de las jornadas tuvo que extenderse un día mas), es tiempo de que la Federación Dominicana de Baloncesto (Fedombal) se siente a analizar todos los innumerables errores que cometieron en el montaje del evento.

Lo primero que debemos de aprender de esta amarga experiencia, es que todos los torneos son importantes, es decir, la raíz de todos los problemas vividos en este Centrobasket radican en la decisión de no asistir al torneo Caribeño del 2009 que era clasificatorio a este torneo.

Sorpresivamente la Fedombal convocó a una rueda de prensa en ese entonces para comunicar que se había acordado no asistir al torneo Caribeño para centrar todos los esfuerzos y recursos en el torneo Premundial, y que para no quedarnos fuera del ciclo Olímpico se había enviado una carta de intención a FIBA Américas para ser la sede de este Centrobasket.

En ese momento, ellos nunca se imaginaron que el “Dream Team” que se llevó a San Juan, Puerto Rico, iba a fracasar como lo hizo, y que no iba a clasificar al Mundial de Turquía de este año.

El sinsabor fue sobremanera en todos los ámbitos de la Republica Dominicana después de aquella derrota ante Canadá, un fracaso mayúsculo que dejó el baloncesto en estado crítico, y necesariamente con la obligación de conseguir la sede del Centrobasket para no quedarnos fuera del ciclo olímpico.

Bajo esas circunstancias se consiguió esta sede, en medio del desorden, de la falta de información, e incluso obligando a FIBA Américas a realizar un viaje a Panamá para ofrecerles la sede, ya que la Fedombal había incumplido en el pago de la primera cuota exigida para confirmar ser el país anfitrión.

Y es que lo que mal empieza, mal termina, y durante una semana fuimos puesto en el escenario mundial como la vergüenza de Centroamérica y el Caribe, porque montamos un evento sin tener las condiciones necesarias para albergarlo, incluyendo lo más simple: un lugar apto para jugar un torneo de la calidad de un Centrobasket.

La falta de aire acondicionado en las primera tres fechas terminó obligando a la cancelación de la jornada del pasado miércoles, luego de que las condiciones del tabloncillo se volvieran caóticas y peligrosas, atentando contra la integridad de los jugadores.

Es ahí cuando la Federación Dominicana de Baloncesto que preside el ingeniero Frank Herasme, busca una solución “salvadora” instalando unos sistemas de climatización alternativos que solucionaron ese problema.

Pero como se preguntó uno de los jugadores en una de las ruedas de prensa, hoy yo me pregunto: ¿Y por que no lo hicieron cinco días antes?

Durante todo el evento, las autoridad de Fedombal se mantuvieron culpando a diferentes instituciones del estado de la responsabilidad del desastre ocurrido en Centrobasket, pero es necesario recordarle a los federados dominicanos que dirigen el baloncesto, que los responsables del montaje de dicho evento eran ellos, no importa de donde salieran los recursos, había que tener a tiempo todas los problemas resueltos a mas tardar el domingo 4 de julio, 24 horas antes de dar inicio a tan magno evento.

Es tiempo de cambiar, es tiempo de dejar atrás una estructura basada en la mentira, en la utilización de los medios para difundir informaciones no basadas en la realidad, decir una cosa hoy y otra mañana, es por eso que no tienen credibilidad.

Si queremos resultados diferentes, tenemos que empezar a hacer las cosas diferentes.

Hoy hacemos un llamado a la atención a que entiendan que el pueblo dominicano está cansado de una y otra vez ver como el desorden, la improvisación, el deseo de protagonismo, y la irresponsabilidad se hacen presente en el baloncesto dominicano.

El problema no es Musselman, ni Toro, ni Smart ni Roth, todos estos han dirigido el equipo dominicano en los últimos cinco años, el problema está dentro, el problema está en la estructura, que llegó a su tope, que ya no tiene respuesta, que necesita un relevo, personas nuevas con integridad en sus acciones, que dejen de lado los intereses personales para poner al frente el amor por la patria y por el baloncesto.

No es posible dirigir el rumbo de nuestro baloncesto, basado en tener que complacer a un sinnúmero de asociaciones, solo con el único objetivo de contar con el apoyo de estas en las elecciones de Fedombal.

Ganamos en la cancha, pero fracasamos en las oficinas, felicito a los jugadores (Jack, Charlie, Kelvin, Manuel, Ronald, Joel, Juan Pablo, Fortuna, Filión, Paniagua, Western y Morban) por su gran entrega, el pueblo dominicano está muy orgulloso de ustedes.

Y termino diciendo: Nada podemos contra la verdad sino por la verdad.

Vienen muchos compromisos por delante, pero la pregunta es: tiene la Fedombal la capacidad de asumir dichos retos?

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