La forma en la que terminó el Torneo de Baloncesto Superior del Distrito Nacional debe llamar a la reflexión por parte de la Asociación de Baloncesto del Distrito Nacional (Abadina).
Tras muchos tropiezos econónimos y técnicos, la final entre Rafael Barias y San Lázaro, así como la semifinal del primero contra Bameso demostró que todavía el baloncesto superior del distrito tiene reservado su espacio en el corazón de los fanáticos.
Hay que dar mucho crédito a las nuevas franquicias. Los barianos y los bamesianos dieron cátedra, no solo de buen juego y buena dirección en el tabloncillo, si no también en la gerencia y organización de sus escuadras.
Lamentablemente otros equipos no pudieron conseguir el apoyo de parte de patrocinadores y anunciantes para poder competir con los dos mencionados y el San Lázaro.
Pero el regreso del fervor por parte del público debe ser un pie de amigo para que tanto la Abadina como los clubes que participan en el torneo superior puedan encontrar las puertas abiertas para el próximo año.
Sin embargo, todavía quedan muchos puntos por mejorar que, de comenzar a trabajar desde ahora, pueden contribuir a que la justa continúe consolidándose en los próximos años.
PUNTOS A MEJORAR
Tras muchos tropiezos econónimos y técnicos, la final entre Rafael Barias y San Lázaro, así como la semifinal del primero contra Bameso demostró que todavía el baloncesto superior del distrito tiene reservado su espacio en el corazón de los fanáticos.
Hay que dar mucho crédito a las nuevas franquicias. Los barianos y los bamesianos dieron cátedra, no solo de buen juego y buena dirección en el tabloncillo, si no también en la gerencia y organización de sus escuadras.
Lamentablemente otros equipos no pudieron conseguir el apoyo de parte de patrocinadores y anunciantes para poder competir con los dos mencionados y el San Lázaro.
Pero el regreso del fervor por parte del público debe ser un pie de amigo para que tanto la Abadina como los clubes que participan en el torneo superior puedan encontrar las puertas abiertas para el próximo año.
Sin embargo, todavía quedan muchos puntos por mejorar que, de comenzar a trabajar desde ahora, pueden contribuir a que la justa continúe consolidándose en los próximos años.
PUNTOS A MEJORAR
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La Abadina no puede dejar la organización del torneo a los propios clubes. Tiene que conformarse un comité organizador que podría ser integrado por los propios gerentes de cada equipo, pero que sean personas del sector privado, no ligados íntimamente al club, que defiendan sus derechos, pero que tengan una visión empresarial del certamen.
No se puede seguir transmitiendo por un canal de corto alcance, que cuando el partido está en su mejor momento lo corta para colocar un programa de panel. Hay que negociar, por intercambio o cualquier otro método para que el torneo se pueda ver a nivel nacional.
Hay que dar algún nivel de confort a los fanáticos para que se sientan atraídos al Palacio de los Deportes.
Ofrecer más variedad en los alimentos que se expenden, que el aire acondicionado funcione adecuadamente, que el entorno del Palacio de los Deportes esté iluminado y que los baños tengan sus bombillas y puedan ser descargados.
La seguridad debe estar garantizada, cada día, tal como se hizo en el partido del martes, sin importar la cantidad de personas que asistan. Se debe permitir que los jugadores llamados a la preselección puedan jugar, como pasa en todos los países del mundo, ya que eso aporta figuras que el público va a ir a ver.
Una mejor y mayor promoción a nivel de los medios electrónicos también ayudaría a crear una expectativa antes del torneo al igual que un nivel más profundo de seguimiento en los periódicos y demás medios impresos.
La Abadina no puede dejar la organización del torneo a los propios clubes. Tiene que conformarse un comité organizador que podría ser integrado por los propios gerentes de cada equipo, pero que sean personas del sector privado, no ligados íntimamente al club, que defiendan sus derechos, pero que tengan una visión empresarial del certamen.
No se puede seguir transmitiendo por un canal de corto alcance, que cuando el partido está en su mejor momento lo corta para colocar un programa de panel. Hay que negociar, por intercambio o cualquier otro método para que el torneo se pueda ver a nivel nacional.
Hay que dar algún nivel de confort a los fanáticos para que se sientan atraídos al Palacio de los Deportes.
Ofrecer más variedad en los alimentos que se expenden, que el aire acondicionado funcione adecuadamente, que el entorno del Palacio de los Deportes esté iluminado y que los baños tengan sus bombillas y puedan ser descargados.
La seguridad debe estar garantizada, cada día, tal como se hizo en el partido del martes, sin importar la cantidad de personas que asistan. Se debe permitir que los jugadores llamados a la preselección puedan jugar, como pasa en todos los países del mundo, ya que eso aporta figuras que el público va a ir a ver.
Una mejor y mayor promoción a nivel de los medios electrónicos también ayudaría a crear una expectativa antes del torneo al igual que un nivel más profundo de seguimiento en los periódicos y demás medios impresos.
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Escrito por: Alex Rodríguez // www.basketdominicano.com
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